A
lo largo de la historia la publicidad fue utilizada diversas veces en
diferentes países para imponer ideología, promover el culto al líder y afirmar
valores defendidos por los grupos que estaban al poder. Aquí tenemos algunos
ejemplos de ello:
Infierno. Esa era la representación de un estado comunista
en las publicidades del gobierno norte americano durante la Guerra Fría. La
imagen de una bandera americana ardiendo fuego y de la población siendo
agredida por los soldados soviéticos acompañaban el mensaje: “Este es el mañana.
Estados Unidos bajo el régimen comunista”. La intención era trasmitir la imagen
de que los comunistas eran verdaderos demonios y que, si salían victoriosos,
corromperían todos los valores de los americanos.
Carteles y panfletos no era
las únicas armas de publicidad anti comunista durante la Guerra Fría. El cine y
la TV también tuvieron un papel importante al momento de afirmar la ideología
americana. La película “Me casé con un comunista”, de 1949, es un ejemplo de
ello.
“Incluso esta nube tiene un lado bueno”, dice el cartel sobre cómo la
energía atómica podía ayudar a vencer las enfermedades. Una de las estrategias
norte americanas era posicionar la guerra como beneficiosa para la población, ya
que garantizaba el bien estar y la libertad de los americanos. No sólo el
gobierno emitía publicidad, ésta por ejemplo, viene de una empresa privada.
Incluso
Disney se adhirió a la campaña publicitaria, y ofreció a un Mikey que invitaba
a los niños a sumarse a la idea, ya que la guerra era para defender al Tío Sam.
En la Unión
Soviética se utilizaban estrategias muy parecidas para promover la ideología
del régimen comunista. Este cartel, por ejemplo, exalta el servicio de los
astronautas, mostrándolos como héroes nacionales. Exaltar las grandes
conquistas soviéticas era una forma de afirmar la fuerza de la URSS frente a
los ciudadanos.
Gran parte del éxito del Partido Social Nacionalista de
Alemaña fue amparado por el intenso trabajo de publicidad nacista. A través de películas
emocionantes se imponía la ideología y el culto a la figura de Hitler, además
del odio hacia otras razas
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